La frontera ha sido partícipe de importantes incrementos de demanda industrial que unidos a la disminución de la vacancia han sido claves para el ajuste al alza que han mostrado los precios de renta durante el último año en México. 

En términos anuales el precio de renta de los mercados de Ciudad Juárez y Mexicali ha registrado incrementos por encima de 28% y 14%, respectivamente, reflejando los mayores ajustes al alza a nivel nacional. Tijuana, Puebla y Ciudad de México son otros tres mercados que reflejan importantes alzas en rangos entre el 10% y 12% de incremento anual.

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Otro indicador clave es la construcción industrial dinamizada por los desarrolladores en la región que han conducido a Ciudad Juárez y Mexicali a máximos históricos de los últimos tres años, registrando 431 y 253 mil metros cuadrados de obras en proceso, respectivamente. 

Este importante indicador sería un elemento favorable para equilibrar la oferta pero requiere de una participación de la inversión especulativa que aún está por desarrollarse en estos mercados. 

En cuanto a los precios de renta en Ciudad Juárez, el corredor Sur presentó la mayor renta  unitaria al cierre del 2T 2022 por $6.64 dólares por metro cuadrado mensual por encima del promedio de la entidad. 

Mexicali al cierre de agosto 2022 registra una renta promedio de $5.3 dólares por metro cuadrado mensual alcanzando el máximo valor de renta sobre el corredor Carretera Mexicali-San Luis Río Colorado.

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Cuando se analiza el incremento de precios de renta no se puede obviar la espiral inflacionaria que ha impactado a nivel mundial y que en el caso de México ha llevado a 8.7% la tasa de inflación nacional, aun en medio de dos ajustes consecutivos de 75 puntos base aplicados por el directorio del Banco de México (Banxico) con el fin de lograr la convergencia de la inflación.

La inflación afecta de forma directa a los principales costos de insumos como acero, cemento, asfalto que junto a otros componentes se requieren para construir una edificación industrial. 

Otros factores inherentes al mercado inmobiliario como el equilibrio entre oferta y demanda han sido a su vez detonantes del incremento de precio principalmente en los mercados de la frontera norte, donde se dinamizó la instalación de operaciones en suelo mexicano basadas en las ventajas que ofrece el país desde el punto de vista de costos y cercanía al mercado americano.