Reynosa arrancó el año con más de 300 mil metros de construcciones industriales que aunque se han mantenido en niveles altos durante el último semestre no pasa a ser suficiente para el ritmo que marca la demanda industrial.
Parte de esta actividad obedece a la demanda bruta que trimestre a trimestre se mantiene al alza en este mercado fronterizo. Recordemos que durante el 2022 Reynosa acumuló 315 mil metros cuadrados de demanda bruta de naves industriales siendo esta cantidad 30% superior a lo demandado en el 2021.
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Al ingresar a la plataforma Solili y hacer un análisis del mercado de Reynosa filtrando por construcciones verificamos que más del 70% corresponde a proyectos hechos a la medida dejando muy pocas opciones para cualquier inquilino interesado en este mercado.
El corredor Poniente concentra el 58% de las construcciones en ejecución y cerca de la mitad del metraje de naves que se construyen planean su entrega para el término del primer trimestre del 2023 y el resto proyectan su finito hacia el segundo y tercer trimestre. En la actualidad menos de media docena de estas opciones estarán disponibles con entre 9 y 26 mil metros cuadrados.
Reynosa junto a Chihuahua, Aguascalientes, Saltillo y Tecate fueron los mercados donde los desarrolladores durante el 2022 se concentraron mayoritariamente en proyectos a la medida lo que acentuó aún más el descenso en su vacancia. Este indicador al cierre de enero del 2023 disminuyó por debajo del 1%, el menor porcentaje de los últimos dos años.
Otra tendencia que ha registrado este mercado es el incremento de los precios de las rentas que en términos porcentuales ha sido de los más altos a nivel nacional junto a los reportados en Monterrey, Querétaro y Mexicali, superando en todos ello más del 20% anual.
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Este panorama de baja disponibilidad de espacios especulativos en Reynosa ha conducido al cierre de los pre arrendamientos cuando están iniciando las construcciones, lo que favorece al desarrollador al diluir el riesgo y al inquilino de poder asegurar una nave industrial adaptada a sus necesidades.
Este contexto abre una excelente oportunidad para los desarrolladores que tienen disponibilidad de tierras con vocación industrial ya que la combinación con una demanda garantizada anticipa una inversión segura en cuanto a su rentabilidad.