Durante los meses de julio y agosto de 2022 Reynosa ya supera los 96 mil metros cuadrados de demanda bruta industrial alzándose en la tercera posición a nivel nacional, precedida por Monterrey y Ciudad de México, y líder entre los mercados de la frontera norte del país.

Al cierre del 2T 2022 ya la entidad había logrado una demanda bruta histórica de casi 75 mil metros cuadrados trimestrales y que supera en 15% a lo registrado en el mismo periodo del 2021. 

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La demanda se ha concentrado en este periodo sobre tamaños que van de 5 mil a 15 mil metros cuadrados y los desarrolladores Parks, Prologis e IGS han tenido importante participación sobre esta actividad que se ha concentrado en el segmento logístico.

Al analizar la correlación de los principales indicadores en este mercado podemos constatar que en lo que va del año Reynosa proyecta un precio de renta al alza, similar a lo que reportan otras zonas del país.

En este importante mercado de frontera la demanda logró impactar la vacancia que muestra en el último año una contracción de más de 1.7 puntos porcentuales habiendo alcanzado el 1.4% al cierre de agosto de 2022, lo que la conduce a niveles críticos tal como ocurre con poco más de la mitad de los mercados industriales a nivel nacional.

Sin embargo, ante la escasa vacancia la construcción se ha activado y con 270 mil metros cuadrados que registra en el octavo mes del 2022, supera en 2.6 veces lo que venía avanzando en construcción hace un año. 

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El corredor Aeropuerto-Puente Pharr destaca agrupando la mitad de las superficies de las naves industriales existentes y es donde se ha concentrado a su vez la demanda bruta en lo que va del año. La otra mitad aproximadamente se agrupa en los corredores Norte y Poniente que también se mantienen activos y equilibran el desarrollo del mercado en su conjunto.

En lo que resta del año seguirá presente la tendencia del ajuste de precios de renta y la contracción de la vacancia combinadas por el interés por parte de los desarrolladores activos de Reynosa a seguir apostando a la ejecución de nuevos proyectos especulativos, que permitan albergar operaciones logísticas y de manufactura que refuercen el tejido de proveedores de México hacia Estados Unidos.