Hay dos elementos que se deben tomar en cuenta al comercializar tu inmueble: los documentos que necesitas y el estado físico de la propiedad.
Ya sea que nos mudemos de ciudad, se busque un departamento más grande o simplemente cambiemos de ambiente es probable que se tenga que vender un departamento.
De acuerdo con el Colegio de Notarios de la Ciudad de México, para la venta de una vivienda se requiere, en principio, tener en orden y actualizado el Título de propiedad o escritura notarial inscrita en el Registro Público de la Propiedad en el lugar de ubicación del inmueble, así como las boletas de predial y agua pagadas, cuando menos de los últimos 5 años.
También deben incluirse los recibos de luz o teléfono de los últimos 2 años y el contrato de arrendamiento en caso de que el inmueble esté arrendado.
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Si el inmueble fue adquirido estando casado se requerirá el acta de matrimonio y si se adquirió bajo el régimen de sociedad conyugal, legal o en copropiedad con su cónyuge, éste debe comparecer éste a la firma de toda la documentación relativa a la compraventa.
En caso de inmuebles bajo el régimen de condominio, se requiere el reglamento del condominio y una constancia expedida por el administrador sobre la existencia de no adeudos en cuotas de mantenimiento y fondos de reserva.
Así mismo deberá disponer de la identificación oficial del o los propietarios con croquis de localización del departamento o casa para facilitar la ubicación.
Adicional a la documentación, se recomienda hacer algunos trabajos de remodelación de la vivienda para que tenga mayores oportunidades de venta, como cambiar algunas estructuras oxidadas o demasiado gastadas como puertas, ventanas y manijas.
Pintura en tonos neutros, especialmente el blanco, son recomendables ya que este color hace que visualmente los espacios se vean más amplios, a la par de una limpieza profunda en toda la propiedad, especialmente en baños y cocina.
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Saca algunos muebles viejos y cosas innecesarias se logra que el departamento se vea más amplio, pero tampoco se recomienda sacar todos los muebles y dejar la propiedad totalmente vacía, ya que un departamento amueblado permite que los clientes se den una idea de cómo luciría su próximo hogar.
Para determinar el valor de la propiedad se puede recurrir a herramientas de valuación de compañías tecnológicas como Flat.mx o a valuadores independientes.
El pago de honorarios del agente inmobiliario se tienen que considerar al momento de vender la propiedad, así como el pago de impuestos como el ISR (Impuesto Sobre la Renta) al momento de vender la vivienda, el cual corre por cuenta del propietario.
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