Uno de los sectores inmobiliarios que ha sorteado la mayor cantidad de retos ha sido el de oficinas, no solo en México sino a nivel mundial. Los portafolios inclinaban su interés por este tipo de bienes que se caracterizaban por recibir rentas en dólares con horizontes temporales de 5 a 10 años y donde los principales inquilinos los componían multinacionales y empresas locales con amplia solvencia.

Esta situación se desarrollaba en medio de un mercado que generalmente mostraba más demanda que oferta, principalmente en caso de edificaciones clase A que mantenían excelentes localizaciones, construcciones modernas con plantas tipo superiores a mil metros y dotaciones de estacionamientos, ascensores, equipos de aires acondicionados, fachadas que las ponían en ventaja con respecto al resto de los inventarios del mercado.

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Durante los últimos 5 años, el mercado ha mostrado una tendencia clara hacia la construcción de nuevas edificaciones de clase A. Dichos proyectos cuentan con alta calidad y prestigio lo que les permite generar espacios de trabajo tanto funcionales como innovadores para satisfacer las necesidades de las empresas. 

Las edificaciones clase A se caracterizan por factores como el diseño, la tecnología, eficiencia energética y por contar con una localización estratégica, y es por este motivo que han tomado mayor protagonismo durante el periodo.

En los casos de Ciudad de México y Guadalajara avanzan en construcción de proyectos clase A en julio del 2023, el 45% y 42% de lo que se construía en julio del 2019, previo a la pandemia. En Monterrey y Querétaro las construcciones clase A representan el 86% y 61% de lo que avanzaba en construcción hace cinco años. Sin embargo, a nivel nacional Tijuana logra duplicar el espacio clase A, en comparación a lo construido en julio del 2019.

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Otro indicador relevante a la hora de comprender esta dinámica inmobiliaria es la vacancia que en Ciudad de México y Querétaro, aunque ha venido ajustando a la baja de manera paulatina, aún mantienen niveles por encima de lo registrado en julio del 2019. Mercados como Monterrey, Guadalajara y Tijuana si logran niveles mucho más bajos a los registrados previo a la pandemia.

A medida que las empresas buscan mantenerse competitivas en un entorno empresarial que evoluciona día a día, las inversiones en propiedades de la más alta calidad tipificadas como clase A resultan ser una estrategia certera para cumplir con estos objetivos.