La Ciudad de México cerró el 2022 con una demanda bruta industrial que superó 1.5 millones de metros cuadrados caracterizada por la presencia de 95% de operaciones especulativas. 

No es de sorprender que al tratarse de una urbe de las más pobladas en América Latina el comercio electrónico se afianzará como nuevo hábito de la población que demanda bienes y servicios, creciendo a un ritmo del 23% durante el 2022, a nivel nacional, según señala la Asociación Mexicana de Venta Online.

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Más del 65% de los espacios demandados en la Ciudad de México se ocupan por empresas logísticas. Tan solo Mercadolibre, Walmart, DHL y Tiendas 3B en unas pocas operaciones concentran el 18% de las transacciones en la Ciudad de México durante el 2022.

El total acumulado durante el 2022 de la demanda de las naves industriales menores a los 10 mil metros cuadrados representan cerca de un tercio del total de las áreas ante esta tipología de tamaños concentra poco más del 70% del número de transacciones.

Aunque los submercados que conforman el CTT (Cuautitlán, Tultitlán y Tepotzotlán) agrupan el 70% de la demanda durante el 2022 comienza a ascender la participación de espacios industriales en los denominados centros de última milla, donde estamos considerando los submercados de Vallejo, Naucalpan hacia el noroccidente e Iztapalapa hacia el oriente de la ciudad.

Aunque estos submercados de última milla representan aún representan el 5% a nivel del total de la Ciudad de México, existe la posibilidad de que esta participación se incremente en el 2023 en la medida en que avanza el Plan de Desarrollo Proyecto Vallejo-i, promovido por la Alcaldía de Azcapotzalco y el gobierno de Ciudad de México.

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Los viejos espacios industriales que habían alcanzado la obsolescencia funcional tienen una segunda oportunidad con la reconversión hacia un inmueble industrial más moderno y adaptado a los nuevos estándares de la demanda.

La cercanía a vías arteriales o expresas como Circuito Interior o el Viaducto Rio de La Piedad brinda un fácil acceso para estos inmuebles, donde las mercancías deben permanecer el menor tiempo posible antes de llegar al consumidor final.

Sin embargo los corredores tradicionales del CTT superan a Febrero del 2023 más de la mitad de la vacancia que unida al 30% que tiene Toluca deja un importante margen de operación para que estos corredores absorban la actividad de arrendamiento en los próximos trimestres.